Volver a visitar firmas después del año sin tener contacto presencial con ellas produce una sensación extraña. Me viene a la memoria aquella frase “Decíamos ayer” que al parecer jamás pronunció Fray Luis de León. ¡Y han pasado tantas cosas entre el ayer y hoy!
Jueves visité Miquel Valls Economistes, y tuve a dos anfitriones de excepción: Miquel Valls Duran y a Xavi Valls Saez . Padre e hijo, que representan a dos generaciones de una firma que lleva dándolo todo desde el 1985, coincidiendo con la aparición del IVA.
Muy interesante fue la lección que me dió Miquel sobre el relevo generacional. Él lo tiene resuelto con su hermano Joan Valls Durán, su hijo, que lleva más de 18 años en la firma, con Alberto Palencia y Carlos del Valle Mampel. Está haciendo un esfuerzo muy grande para “soltar lastre”. Para apartarse poco a poco sin hacerlo totalmente. Para él supone un gran esfuerzo, porque son muchos años haciendo crecer un proyecto. Pero está haciendo lo mismo que aconsejaría a sus clientes: dejar paso a las nuevas generaciones, en las que confía plenamente. Sabe que deja en buenas manos #MVE
Me encantó su lucidez y ese esfuerzo mental que está haciendo. A veces le sería más fácil acudir por las tardes a la oficina que quedarse en casa. Pero sabe que si no lo hace así, no dejará que las cosas fluyan con naturalidad.
Se encuentran en una etapa de cambios. Están en ello. Y yo estoy convencida que será un éxito. Porque siempre han hecho muy bien las cosas. Como en este año que dejamos atrás: sus clientes han sido una prioridad y no han contado las horas invertidas para ayudarles a salir adelante. Son muchas las empresas cuya viabilidad ha dependido de ellos. Pero a pesar de la situación, se han sentido tranquilas, porque sabían que estaban en las mejores manos. Muchas de ellas del sector de la restauración. Ha sido duro, pero han pasado la prueba.
¡Geacias Miquel Valls Economistas! ¡Por acogerme en vuestra casa y por vuestra fidelidad durante tanto años!